¿Han crecido los casos de bebés prematuros? ¿Ha aumentado su supervivencia? ¿Por qué ha sido? ¿Qué tratamientos se han descubierto? ¿Hay diferencias pulmonares nacer en el segundo trimestre de embarazo frente al tercero? (Leer artículo Bebés prematuros: todo sobre sus frágiles pulmones) Estas, y otras muchas preguntas, fueron resueltas durante el último Congreso de la Asociación Española de Pediatría. El doctor Manuel Sánchez Luna, jefe de Servicio de Neonatología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid y Presidente de la Comisión de Estándares de la Sociedad Española de Neonatología (SENeo) nos cuenta cómo se puede ayudar a los padres de un bebé prematuro.
Dado el aumento de nacimientos de bebés inmaduros, ¿existe apoyo psicológico para los padres de niños prematuros?
Desde hace años nos surgió la pregunta de cómo ayudar y apoyar mejor a los padres de los recién nacidos que ingresan en nuestras unidades. Al ser familias “sanas” en su mayoría el apoyo hospitalario es complejo, así que aprovechamos el aprendizaje que tuvimos de una psicóloga que realizó su tesis doctoral con nosotros sobre el cuidado y la intervención que es necesario en estos padres. Así creamos el Proyecto Abrazo, hoy pionero en España y que en resumidas cuentas se basa en acompañar desde incluso antes del nacimiento a aquellas familias que van a tener un bebé con riesgo de ser hospitalizado para estar con ellos y brindarles apoyo emocional. Detectar precozmente trastornos debidos a este ingreso e intervenir precozmente.
Gracias a la colaboración del Instituto de Investigación del Hospital Gregorio Marañón creamos una beca con fondos externos para dar continuidad al trabajo de la Doctora en Psicología Evelyn Cano que está haciendo una extraordinaria labor, que mediremos y próximamente comunicaremos en los medios científicos para extender esta iniciativa.
¿Por qué es necesario este apoyo psicológico?
El apoyo emocional de las familias de los bebés ingresados en los servicios de Neonatología es básico, es una recomendación además del grupo que desarrolló el plan Estratégico de Pediatría y Neonatología 2010-2015 en la Comunidad de Madrid, pero creo que no se ha llevado a cabo salvo en nuestro centro.
En España, el número de bebés prematuros ha aumentado considerablemente, llegando a representar más de 38.000 nacimientos, que una vez han recibido el alta en el hospital, pueden seguir su crecimiento sin problemas. ¿Qué le diría a los padres que en estos momentos tienen a su bebé en el hospital?
El mejor consejo es que confíen en los profesionales del sistema de salud. Tenemos uno de los mejores sistemas públicos de salud del mundo, y no sólo por sus profesionales sino por sus recursos. Han de recordar que la prematuridad no es un problema que termina cuando ha pasado un tiempo equivalente al que tenía que pasar el bebé intraútero. En muchos casos queda un largo camino por recorrer que desde luego comienza en el centro hospitalario. El apoyo de diferentes profesionales y equipos de estimulación y seguimiento es vital. El trabajo después del alta hay que organizarlo perfectamente desde el mismo momento del nacimiento. Hoy para nosotros en nuestro centro es vital la planificación y los cuidados que han de recibir estos pequeños y sus familias desde el inicio, y como creo que debe de ser acompañarles continuamente y dirigir los esfuerzos a conseguir el máximo del potencial de cada niño.